El gobernador del estado Carabobo, Rafael Lacava, se convierte en el primer funcionario vinculado al gobierno de Nicolás Maduro que se pronuncia sobre la rescisión de contratos a particulares que estaban al frente de estaciones de servicio. “Lo que hubo fue una retoma de unos activos del Estado y el planteamiento que se está haciendo es recuperar los activos de Petróleos de Venezuela (PDVSA) para mejorarlos porque estaban cuasi que abandonados”, dijo el mandatario regional.
La percepción de los particulares que están al frente de este negocio difiere de la que tiene el mandatario regional. Las cifras de PDVSA indican que entre 2012 y 2020 se cerraron 274 gasolineras y la tendencia es a agravarse aún con el precio internacional de 50 centavos de dólar por litro debido a la indefinición legal, inexistencia de regulaciones, falta de claridad sobre el margen de comercialización, incumplimiento en los contratos y el no reconocimiento del valor que tiene el fondo de comercio de los concesionarios, de acuerdo a lo que señalan fuentes vinculadas a la Federación Nacional de Asociaciones de Empresarios de Hidrocarburos (Fenegas) que agrupa a los privados que participan en esta actividad.
La directiva de Fenegas ha evitado un pronunciamiento público sobre la reciente decisión del director de mercado interno de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Marino José Lugo, de rescindir varios contratos a particulares que tenían contratos para el manejo de estaciones de servicio que son propiedad de la empresa estatal y que en algunos casos incluyen derechos de propiedad.
Algunos de los miembros de ese gremio, sobre todo los afectados por la medida, optaron por difundir por redes sociales y aplicaciones de mensajería en teléfonos móviles las cartas de rescisión de contratos firmadas por Lugo y también un memorándum interno emitido por el presidente de Fenegas, José Barros, en el que informa a los concesionarios de las gasolineras en el área metropolitana de Caracas, que también incluye a los estados Miranda y Vargas (ahora La Guaira), que eventualmente recibirían una carta de solicitud de entrega.
“Este nuevo esquema no tiene planteado un cambio como el que dio en 1997 y 1998, el cual abrió espacios para privados y extranjeros y permitió que muchas estaciones estuvieran abanderadas con las marcas de trasnacionales como Mobil, Shell, BP o Texaco o la que crearon empresarios venezolanos como fue Trebol Gas”, señalan las fuentes. “En este caso no hay información sobre el abanderamiento porque hasta eso fue estatizado con la Ley de Reordanamiento del Mercado Interno de los Combustibles (aprobada en septiembre de 2008) y esa tarea se le delegó exclusivamente a PDVSA”, acota.
A fines de los año 90 del siglo pasado, durante el segundo gobierno de Rafael Caldera, se aprobó la Ley Orgánica de Apertura del Mercado Interno de la Gasolina y Otros Combustibles Derivados de los Hidrocarburos para Uso de Vehículos Automotores, la cual permitía que privados pudieran participar en el negocio de transporte, almacenamiento y distribución e incluso importación; pero ahora solo se ha aprobado y se reconocía el valor del fondo de comercio de los concesionarios.
“Esa relación no está planteada en este caso, el abanderamiento tiene que seguir con la marca PDV, con PDVSA o en toda caso lo que llaman punto blanco sin ninguna denominación comercial a menos que deroguen o violen la ley vigente”, acotan.
En la actualidad Venezuela cuenta 1.586 estaciones de servicio de acuerdo a la data que ha difundió PDVSA al anunciar el Plan de Normalización y Regularización del
Servicio de Combustible, el cual entró en vigencia el pasado 1º de junio, cifra que indica una reducción de 14% con respecto a los 1.860 establecimientos que existían en 2012
Los cálculos hechos por PDVSA a través de su filial Deltaven señalaban que había un déficit de 1.000 estaciones para 1997, en la actualidad se requieren alrededor de 3.000 establecimientos lo que implica que el país solo cuenta con la mitad de las gasolineras que hacen falta.
La situación en Carabobo
El gobernador del estado Carabobo, Rafael Lacava, recurrió a su cuenta en la red social Instagram para dar su versión, quizás en respuesta a quienes sostienen también por redes sociales que la intención es otorgar esas estaciones a empresarios adeptos a su gestión.
“PDVSA decidió retomar parte de sus activos que tenía en el estado Carabobo y cuando habló de sus activos son 14 de las 92 estaciones de servicio que están operativas y se las entregó a la Gobernación. En esas hay estaciones bien ubicadas y otras mal ubicadas, entonces como alguien puede pensar que estamos expropiando algo si yo me estoy cargando el calamar de unos puntos de venta que no son buenos. A mí me entregaron las estaciones de servicio que eran propiedad de PDVSA”, dijo Lacava. “Muchos de estos concesionarios habían subarrendado de manera ilegal, no estaban en el país y habían abandonado esos activos a la suerte de Dios pese a que tenían la obligación de salvaguardarlos y protegerlos. Llegó el momento, producto de un mecanismo distinto del negocio de combustible, y el Gobierno nacional decidió modificarlo”, añadió.
Lavaca no explicó quiénes estarán al frente de estas 14 estaciones ni tampoco cómo funcionará el acuerdo suscrito entre PDVSA y el Ejecutivo regional. “Quienes dicen que nosotros estamos expropiando eso es un pavoso y un manipulador”, sentenció.
PUBLICADO: 04 de julio de 2020