Cuatro de cada 10 hogares venezolanos no consiguen bombona de gas para cocinar

El Observatorio de Derechos de Propiedad de Cedice llevó adelante la investigación “El gas en Venezuela: el retorno de la era de la leña”, bajo la coordinación del economista Raúl Córdoba Arneaud en el cual se advierte que los problemas financieros y de producción de hidrocarburos que afronta Petróleos de Venezuela (PDVSA) y la estatización ordenada por el presidente Hugo Chávez en 2007 en el sector gasífero ocasionaron un desplome en la actividad del llamado gas doméstico.
“La producción de propano oscila entre los 18.000 y 20.000 barriles diarios, lo que cubre menos del 65 % de la demanda, con lo cual cuatro de cada diez hogares que necesitan una bombona, no pueden obtenerla; y las plantas ubicadas en el occidente del país no producen desde 2008”, señala el reporte de la investigación. “La situación con el gas doméstico/comercial afecta negativamente el desenvolvimiento cotidiano de los venezolanos que intentan hacer vida en el país. En términos geográficos, la situación se empeora aún más, debido a la ausencia de infraestructuras de transporte (gasoductos)
hacia la región andina, los Llanos y oriente”, acota el estudio.
En la actualidad solo se produce gas propano en el área de Santa Bárbara, Jusepín y El Furrial, al norte del estado Monagas, el cual es procesado en el complejo de Jose en Anzoategui para atender una demanda total que se aproxima a 35.000 barriles diarios, pero de ese volumen existe un déficit que no cubre el consumo de 40% de los hogares.
El informe reseña cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en el que se advierte que el precio subsidiado de la bombona de gas no cubre los costos de producción. “Según
los datos de la Cepal, en América Latina un cilindro (bombona) de 10 kilógramos cuesta alrededor de 15 dólares, mientras que en Venezuela está regulado en  70 céntimos de dólar”, indica.
La escasez está provocando que el precio de venta en el “mercado negro” se aproxime al del mercado internacional, un patrón similar al observado con la gasolina durante el primer semestre del 2020