Deterioro de relaciones entre nuevo gobierno de Trinidad y Tobago con Venezuela pone en riesgo convenios de gas entre ambos países

Kamla Persad-Bissessar es la primera ministra de Trinidad y Tobago desde el primero de mayo. Pertenece al partido Congreso Nacional Unido y con su llegada se puso fin a la relación que se construyó con Venezuela en materia energética con Stuart Young como ministro de Energía e Industrias Energéticas durante parte del gobierno de Keith Rowley, pertenecientes ambos al Movimiento Nacional del Pueblo.
Young estuvo como primer ministro entre marzo y mayo de este año tras la dimisión de Rowley y había expectativa que su organización política fuera la ganadora para avanzar en la relación con Venezuela porque él fue clave no sólo para convencer al gobierno de Joe Biden de la importancia de tener una licencia del Departamento del Tesoro para la compra de gas a Venezuela en campos marítimos limítrofes; sino también en las negociaciones y la relación que construyó con la vicepresidenta ejecutiva Delcy Rodríguez para las firmas de acuerdos que permitan la exportación total del gas extraídos en el campo Dragón y áreas de la plataforma deltana.
Tras su triunfo a fines de abril, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela emitió un comunicado en el cual la felicita, menciona lazos históricos entre los dos países y hace especial referencia a los acuerdos suscritos para el suministro de gas natural.
“Venezuela reitera su compromiso con la continuidad de los proyectos conjuntos, especialmente en el ámbito de la seguridad energética, asegurando un suministro confiable de gas para Trinidad y Tobago, lo cual contribuirá al desarrollo sostenido de ese país y de toda la región caribeña», indica el texto de la cancillería venezolana.
Sin embargo, las relaciones entre ambos países se han deteriorado de manera acelerada en menos de dos meses sobre todo durante junio tras la detención de un ciudadano trinitense y las acusaciones del propio presidente Nicolás Maduro junto a las del ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello, que “terroristas y mercenarios incursionan a Venezuela desde Trinidad y Tobago”.
La premier trinitense, abiertamente adversa al gobierno de Maduro desde su posición como dirigente de oposición, no rechazó las acusaciones provenientes desde Venezuela, sino que amenazó con una respuesta militar si hay una incursión por parte de Venezuela y en materia energética sentenció: “El acuerdo de gas del campo Dragón está muerto”, declaración que ha generado rechazo de su antecesor Stuart Young.
Kamla Persa-Bissessar por segunda vez ocupa el cargo de primera ministra de Trinidad y Tobago, puesto que su primera administración fue entre 2010 y 2015.