Suspensión de vuelos en Venezuela repunta demanda de combustibles para aviones en Colombia

La suspensión de vuelos hacia República Dominicana y Panamá convirtió al estado Táchira en el epicentro de la aviación venezolana con al menos 35 vuelos semanales entre el aeropuerto de Maiquetía y los tres terminales aéreos de esa región (San Antonio, Santo Domingo y La Fría) sino que también ha elevado la actividad aérea en los aeropuertos de Colombia fronterizos con Venezuela como Cúcuta, Riohacha e incluso Santa Marta y Barranquilla.
Eso repunte se ha convertido en una de las causantes del incremento de 17% en el consumo de combustibles para aviones -que responde al nombre de Jet A-1- entre junio y agosto, lo que la convierte en una de las causas para que la oferta proveniente de las refinerías de Cartagena y Barrancabermeja no pueda atender la demanda.
“Históricamente se han venido demandando cerca de 35.000 barriles diarios de combustibles para aviones en Colombia, pero en los últimos meses se han venido reportando incrementos por el orden de 6%, pasamos primero a 37.000 barriles por día en los dos últimos dos meses y a 41.000 barriles para los próximos”, dijo Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol.
Los aeropuertos “Camilo Daza” de Cúcuta, “Almirante Padilla” de Riohacha y “Ernesto Cortissoz” en Barranquilla han venido reportando incrementos en la afluencia de pasajeros, así como de vuelos durante 2024 y en buena medida está vinculado con los venezolanos que llegan a estos terminales
para hacer alguna conexión hacia un tercer país, principalmente Panamá o
Estados Unidos.
“Somos muy dependientes solo de dos refinerías; por tanto, cuando una o ambas fallan y se presenta una variable como el aumento en la demanda eso genera unos grandes perjuicios si no cuenta un protocolo de respuesta ante crisis y desafortunadamente no lo tenemos”, explica la abogada
Claudia Cleves, experta en asuntos regulatorios en el mercado de hidrocarburos en Colombia. “Uno de los ejes focales de la demanda ha sido el aeropuerto de Cúcuta y eso se suma todos los problemas que ha
habido en Venezuela con la aviación junto al repunte de la migración, todo esto ha ocasionado que las fluctuaciones varíen bastante en el consumo de combustibles para aviones”, añade.