El presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP), Francisco Lloreda, señaló que la suspensión en el servido del Sistema del Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) perjudica el transporte de crudo colombiano, que viene utilizando esa tubería debido a las elevadas tarifas que se pagan en Colombia.
“Hay un porcentaje de crudo colombiano que ha ido encontrando en los oleoductos ecuatorianos una opción muy importante para sacarlo a puerto, especialmente por parte de empresas que están en el departamento del Putumayo, pero desafortunadamente debido a las restricciones del desplazamiento y de movilidad en este momento no está permitido el transporte de crudo al Ecuador”, dijo el representante de la ACP. “Las empresas que estaban utilizando el oleoductos del Ecuador han tenido que acudir al Oleoducto Transandino, que comunica el Putumayo con el puerto de Tumaco, y es uno de los más costosos”, añadió.
El presidente de la ACP a finales de abril denunció que el sector petrolero colombiano perdía competitividad por el hecho de que los oleoductos en Colombia cobrar tarifas de 3,50 y hasta 7,75 dólares por barril mientras que en Ecuador se paga 2,50 dólares, lo que había llevado a empresas.
Lloreda reiteró que las referidas tarifas que cobran filiales del Ecuador por el traslado de crudo son elevadas frente a la de otras naciones y señaló que los financiamientos otorgados ayudan de manera puntual y temporal pero no resuelven la situación sobre todo en la actual coyuntura de bajos precios.
“El problema de fondo en Colombia es que no tiene tarifas competitivas de transporte de crudo y eso pasa porque 70% de la fórmula tarifaria depende de la valoración de activos y en los cálculos de las empresas transportadoras son tres veces más que la valoración de esos mismos activos en los estados financieros de las compañías operadoras”, dijo.
Precisó que 13 empresas han solicitado algunas de las opciones de pago presentadas por las empresas transportistas y seis se han acogido a alguna de las modalidades, dos de ellas por la opción de financiamiento hasta diciembre de 2020.
Comercio legal de gasolina
El presidente de la ACP ofreció una conferencia de prensa para presentar un balance sobre los impactos del COVID-19 en la distribución de combustibles líquidos en Colombia, señalando cifras de una caída de 70% en el expendio de gasolina y de 50% del diésel durante el mes de abril. No obstante, resaltó un repunte en el consumo en mayo.
“Si bien no creceremos en consumo, y posiblemente no regresemos en el corto plazo a los niveles registrados antes de la pandemia, la demanda de combustibles es una buena señal de la dinámica económica, por lo que esperamos que a medida que se vayan reactivando más sectores productivos, esta continúe recuperándose”, dijo Lloreda. “El sector de combustibles representa el 1% del producto interno bruto y es el que mueve a Colombia, suministrándole los combustibles que necesita para la movilización de personas, transporte de mercancías, el funcionamiento de industrias, la agricultura, entre otros”, indicó.
Los técnicos de la ACP destacaron que la demanda de combustibles en la zona de frontera –principalmente con Venezuela- empieza a hacerse cada día más legal y menos informal la venta de gasolina.
PUBLICADO: 06 de junio de 2020