La Asociación Venezolana de la Industria Química y Petroquímica (ASOQUIM) presentó los resultados de la más reciente Encuesta de Coyuntura que realiza entre sus agremiados en la que se revela que 74% de las empresas están operando por debajo del 40% de su capacidad, lo que implica que 3 de cada 4 empresas tienen ociosa más del 60% de su capacidad de producción.
A lo anterior se agrega –de acuerdo al estudio- que productos como pinturas y esmaltes, lubricantes o artículos de higiene del hogar e industrial hechos en el país están siendo desplazados por similares importados sin pagar aranceles ni Impuesto al Valor Agregado (IVA) por la vigencia del debido presidencial de agosto de 2018.
“La recuperación real de la industria en general pasa por la derogación del decreto que abrió la importación de bienes terminados con privilegios arancelarios, cuando deberían cobrarse los mismos impuestos que sí debe pagar el empresario nacional”, dijo el presidente de Asoquim, Guillermo Wallis. “Si el gobierno espera que la economía venezolana presente mejores indicadores en el corto plazo, que es también nuestra aspiración, es imprescindible que las autoridades tomen en cuenta los planteamientos y solicitudes del empresariado que se mantiene firme produciendo, trabajando y generando bienestar para sus trabajadores y el consumidor en general”, acotó.
La Encuesta de Coyuntura recoge datos de lo ocurrido durante el cuarto trimestre de 2021 y revela que 53,5% de los encuestados afirmó que hubo un incremento en las ventas, mientras que para 23,7% se mantuvo igual y el restante 21,1% sufrió una caída.
También la investigación indica que 60,7% de la muestra logró incrementar su producción, mientras que casi 30% reportó una disminución, pero la recuperación al cierre de 2021 es con respecto a 2020 cuando la producción y las ventas bajaron como consecuencia del cierre de la economía debido a la pandemia.
“Si las empresas tienen que producir menos y, por lo tanto, vender menos, eso significa que los ingresos no son suficientes para contratar más trabajadores y mucho menos para mejorar los salarios y beneficios”, declaró Wallis. “Por el contrario, cuando aumenta la producción y las ventas estas empresas tienen incentivos para generar más empleos, subir las remuneraciones y dar más beneficios a su personal”, agregó.
El representante gremial explicó que actualmente, tanto industriales como comerciantes, coinciden en que los principales factores limitantes para su actividad económica son la baja demanda nacional, la competencia de productos importados, la falta de financiamiento y los excesivos tributos fiscales y parafiscales.
PUBLICADO: 30 de marzo de 2022