La sanciones de prohibición comercial que la Oficina de Control de Activos de los Estados Unidos Estados Unidos (OFAC por sus siglas en inglés) impuso a PDVSA el pasado 28 de enero tienen una serie de fases o hitos que se extienden hasta fines de julio; y en la medianoche de este 27 de febrero cesó la primera de las excepciones o licencias que se habían establecido con el fin de facilitar una reducción progresiva de los contratos existentes con la petrolera venezolana.
A partir de este 28 de febrero, se impone la limitación de importaciones por parte de empresas establecidas en Estados Unidos de bienes, servicios o tecnología suministrado por PDVSA o cualquier compañía en la cual la estatal venezolana tenga una participación igual o superior a 50%.
El literal b de la licencia 12 emitida por la OFAC indica que durante un mes –que se inició el 28 de enero- se permitirían determinadas transacciones que “normalmente se consideran son incidentes y necesarias para la liquidación de operaciones, contratos u otros acuerdos”, pero esta dispensa quedó sin efecto desde este 27 de febrero.
Esto restricción se suma a las prohibiciones contra el Gobierno de Nicolás Maduro y PDVSA aprobadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, bajo la Orden Ejecutiva 13.850.
PUBLICADO: 28 de febrero de 2019