El ministro de Energía de Arabia Saudita, Abdulaziz bin Salman Al-Saud, no logró convencer a su homólogo ruso, Alexander Novak, de sumarse a la propuesta de un recorte adicional de producción de petróleo de 500.000 barriles diarios, que se sumarían al vigente por 1 millón de barriles por día y la consecuencia no se hizo esperar: los precios del crudo de referencia internacional como el WTI y el Brent se desplomaron cerca de 5 dólares en un día.
En la reunión ministerial N° 178 de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que se realizó el pasado 4 de marzo en Viena con carácter de extraordinario, se acordó que el recorte adicional no fuera para todo el año 2020 como fue la propuesta original de los técnicos sino que se mantuviera hasta el 30 de junio y eso se hizo con la idea de sumar a Rusia.
No obstante, el criterio que predomina en Novak es que un recorte de producción implica abandonar mercados y ese espacio pasaría a ser ocupado por Estados Unidos gracias al persistente repunte que ha tenido ese país en su producción e incluso en sus exportaciones de crudo debido al desarrollo del shale oil o petróleo en lutitas.
La propia Rusia ha ganado espacios de mercado en Estados Unidos que en el pasado llegó a tener Venezuela y en la actualidad figura como el cuarto suplidor de crudo de la nación norteamericana.
PUBLICADO: 08 de marzo de 2020