Los ejecutivos de la empresa española Repsol han aprovechado los encuentros que han sostenido, primero con la vicepresidenta ejecutiva y ministra de Petróleo, Delcy Rodríguez; y luego con el presidente Nicolás Maduro en los que se ha reafirmado la garantía de las inversiones que ha realizado en Venezuela, pese al temor que surgió cuando el presidente de
la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, anunció que el parlamento exhortaría una ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con España.
“Si bien hay avances en el sector petrolero, principalmente con la empresa mixta Petro Quiriquire; no ocurre lo mismo con las licencias de gas natural, principalmente porque no se ha permitido que Cardón IV pueda exportar”, dijo una fuente vinculada a la empresa española al referirse a este proyecto en sociedad con la italiana ENI. “PDVSA Gas no paga por el gas
que recibe, no se le permite exportar y por eso la producción se ha quedado estancada en 540 millones de pies cúbicos cuando el plan era que en este momento se estuviera en 1.600 millones de pies cúbicos”, agregó.
Tampoco hay una respuesta del gobierno de Maduro con respecto a las licencias de gas en tierra firme como es el caso de Quiriquire Gas en el estado Monagas, donde tiene una participación mayoritaria de 60% en sociedad con PDVSA que tiene 40%.
Los representantes de la empresa española, tanto en Madrid como en Caracas han evitado emitir un pronunciamiento sobre los encuentros con las autoridades venezolanas. Solo hubo una declaración desde España, tras la advertencia hecha por el presidente del parlamento venezolano, en la que se dijo: «Repsol está presente en Venezuela desde 1993 y desde entonces mantiene un compromiso con los venezolanos y un respeto escrupuloso del marco normativo del país e internacional».
PUBLICADO: 07 de octubre de 2024